Hola amigos,
¿Cómo andan? Yo estoy de maravilla y con muchos ánimos les traigo este material
que tanto me emociona escribir. El futbol es una de las cosas que más disfruto
hacer, y por lo tanto, una pequeña publicación sobre el mismo no vendría mal…
Sin más dilación, comencemos.
Bueno, como ya
muchos sabrán, en la Republica Dominicana, como en muchos otros países, se
celebra la Copa Coca Cola, el torneo intercolegial de futbol en la modalidad de
campo más grande en el mundo, y este año tuve la dicha de poder ser partícipe
del mismo con mi institución educativa, el Colegio San Judas Tadeo. El evento
es auspiciado obviamente por la compañía Coca Cola, con patrocinadores
oficiales como la bebida energética Powerade y Adidas. Es celebrado en el
Estadio Quisqueya a comienzos del mes de abril hasta mediados de mayo,
compuesto por tres fases, el repechaje, en el cual juegan los equipos que no
pudieron clasificar a la fase de grupos en el campeonato del año previo, la
fase de grupos, donde de forma aleatoria se forman tres grupos de cinco
colegios cada uno y estos disputan entre los miembros de su grupo para
conseguir victorias, valoradas con tres puntos, y en caso de empatar seria uno,
dos de los cinco equipos pasan a la siguiente fase, la eliminatoria, donde se
juegan cuartos de finales, posteriormente semifinales y en último lugar, las
finales. Esta experiencia que sentí al jugar la copa, ha sido inigualable.
Desde el mes de
enero nos preparaban sin descanso para el torneo con diferentes métodos y
ejercicios, y cada vez más, mis compañeros y yo aprendíamos y desarrollábamos
habilidades que llegaban a ser necesarias para la copa, por ejemplo la
resistencia, la fuerza de pateo, la precisión en los pases, pero sobretodo,
aprendíamos a trabajar en equipo. Desde el mes de enero, sentía una gran
emoción dentro de mí por jugar la copa. El primer juego era una fecha distante,
pero el tiempo pasaba volando, y pasaron tres meses en un abrir y cerrar de
ojos. Ahí me veía yo, frente al público en mi primer juego de la copa, sentí un
vigor indescriptible y la emoción era difícil de contener, fueron sentimientos,
que no los cambiaría por nada del mundo… fueron sentimientos, que me hacen amar
al fútbol cada vez más, y me doy cuenta de que la elección que hice al momento
de decidir irme por ese deporte, fue la correcta.
Desafortunadamente,
no conseguimos pasar a la fase de la eliminatoria, pero considero que lo que
vivimos en los partidos jugados es suficiente para escribir una revista, sin
mencionar que dimos todo lo que pudimos y mostramos todas nuestras habilidades
en el campo. Fue un evento con una gran organización y control, el staff fue de
maravilla, el equipo médico y la gestión del equipamiento necesario fue
totalmente excelente. La Copa Coca Cola es algo que realmente motiva a
cualquier adolescente futbolista, fue una lástima que no hubiéramos conseguido
avanzar a la última fase, pero, el próximo año será…
Esto ha sido
todo por hoy, espero que les haya gustado y nos vemos en la próxima, adiós.
No hay comentarios:
Publicar un comentario